lunes, 19 de noviembre de 2007

Otra historia

Ella quería dejarlo pero no pudo. Se tendría que haber levantado más temprano para salir de ahí pero no se despertó, estaba cansada y tenía los ojos hinchados. Juan seguía enojado pero no decía nada, su silencio era aún más intimidante que sus gritos.

No hay comentarios: